Hasta aquí

Más allá de los resultados deportivos, la noticia de los últimos días es la marcha de Josep Guardiola del banquillo del FC Barcelona. El, hasta el próximo 31 de Junio, entrenador culé dice no poder más, no tener fuerzas, y necesita desconectar. Habla del mucho desgaste que le han producido los últimos cuatro años en el banquillo del Barça y comenta también que tantos años en ese banquillo son muchos. ¿Es verdad que Guardiola no puede más o el problema es otro? Es cierto que Pep llevaba tiempo avisando que no pretendía acomodarse por mucho tiempo en ese puesto y de ahí que también fuera renovando su contrato año a año, pero en los últimos días se especula con que puede ser la relación con algunos de sus jugadores lo que le ha dicho decir: hasta aquí. ¿Por qué? Para no ser el causante de la marcha de determinados jugadores que él en el fondo aprecia. En principio se tomará un tiempo de descanso pero la verdad, bajo mi punto de vista, Guardiola lo que tiene previsto es volver al club en otro cargo bastante más importante que el de entrenador.

Vilanova sustituirá a Guardiola al frente del Barcelona

¿Y ahora qué? Muchos culés hablan en los últimos días de la elección de Tito Vilanova con agrado. Pero, ¿va a ser realmente lo mismo? ¿está Tito preparado para ser la cabeza que reciba todos los golpes y no un mero segundo? La verdad es que el anuncio de Sandro Rosell cogió a todo el mundo por sorpresa, nadie se esperaba esa elección, y eso ya da que pensar. Si el segundo de Guardiola fuera la mejor opción, los medios, alguno por lo menos, habría dado su nombre como posible candidato al banquillo, pero nadie lo hizo, nadie sacó su nombre. Hay que tener en cuenta que no es lo mismo ser primer entrenador que segundo, puedes tener mucha idea futbolística pero a la hora de dirigir un vestuario no ser el más idóneo. Alrededor del mundo hay gente con muchos conocimientos futbolísticos pero que no tienen don de mando para dirigir a un grupo. ¿Será este el caso de Vilanova? El peso de Guardiola no era sólo el de un mero entrenador, era mucho más. Fue símbolo como futbolista, lo fue y lo seguirá siendo hasta el final de esta temporada  como entrenador y su sombra abarca mucho más que un vestuario. Entrenador, imagen y portavoz del club, un tres en uno que con su marcha desaparecerá puesto que Tito Vilanova, por muy buen entrenador que sea, sólo es eso: entrenador.

Guardiola, como digo, es en el club algo así como un enlace entre todos los estamentos del barcelonismo, ya sea por su historia como futbolista, o ahora como entrenador, o por lo que sea, pero lo es. Tito va a ser únicamente entrenador y ese es el peligro que conlleva la marcha del de Santpedor. Ahora va a haber mucha más gente manejando en la sombra y eso, en cualquier club de fútbol, siempre es malo. Y no sólo eso, ahora los portavoces van a ser otros. Además, los futbolistas no van a ver a su nuevo entrenador como un mito del club a quien venerar y a quien seguir dijera lo que dijera. El poder que podía tener Pep sobre los jugadores dejará de exitir y será Vilanova el que se tenga que sacar un conejo de la chistera para hacer que todo continúe como hasta ahora o al menos parecido. Tarea complicada.

En definitiva, los culés parecen creer en la nueva apuesta, en este caso parece que de Zubizarreta, y sólo queda esperar que Guardiola no se haya tomado a mal la permanencia de Tito en el Barça y este no acabe como su tocayo, el hijo del emperador Vespasiano, a quien traicionó su propio hermano y llevó al Imperio a la ruina durante su mandato. Cualquier conato de guerra cerraría esta etapa gloriosa del Barcelona de un portazo. Si la elección ha sido un acierto lo sabremos muy pronto. Eso sí, con Guardiola fuera lo que va a haber, día si y día también, son especulaciones sobre lo que pretende o no pretende Pep. ¿Será más pronto que tarde rival de Rosell por la presidencia del FC Barcelona?

Puedes seguir a Tres Cuartos en Twitter, Google+ o Facebook